Esto no es un poema y nunca tuvo un tiempo.

Es inevitable, ineludible
Y aunque suene inconcluso, insulso
No puedo vivir sin vos, no como se vive en la normalidad
No como se vive en la tranquilidad o la paz
No puedo por la simple cobardía de querer avanzar
De pasados marcados, rasgados, y pies rotos
De pasados presentes con vos
Pasados borrosos que vivimos
Pasados que a decir verdad, nunca supe si fueron verdad, o fueron historias fantasiosas que nos quisimos contar.

La infinidad de acuerdos que me he hecho se han quedado sin tregua
Es que ni yo misma le creo a mi indeleble voluntad
He firmado tratados con la cordura y la locura al tiempo
Con la locura de olvidarte y quererte al tiempo
Con la cordura de tener que dejarte, aunque no lo quiera
Cordura esta que me duele en las venas.

No pretendo hacer un poema, una prosa o algo bello
Tal vez nunca lo pretendí, a final de cuentas
Esto es solo un grito del alma que se va incinerando en desafíos
En disonancias, en cosas irreales y que se le escapan a la inmensidad
En esas cosas que se vulneran cuando se llega a un punto en el que dejas de ser tú
Dejas que los impulsos, los anhelos, y porqué no, el AMOR te cambien toda la realidad,
cambien toda una verdad con el simple fin de lograr ser, de querer permanecer, pero que al final resultan no ser.
Cada vez, cada día, hora, minuto, palabra o silencio, cada caricia o mueca... cada arrebato
Cada poro que hizo puente entre nuestras venas, cada cosa... cada vos o cada yo
Nos van cavando profundo las mentiras, y van hiriendo las hazañas, los sueños, mis sueños, mis ganas
Van crucificando las realidades en madera pulida, y quedan expuestas como imagen en una pared de museo,
Se quedan ahí como obras de arte, bellas y perennes, pero a decir verdad, resultados ficticios para contemplar.
Así como los bodegones de Vang Gogh, los relojes de Dalí, así como las mujeres de Picasso, así quedé yo mezclada con vos.
Porque no son ni serán mujeres, frutas o relojes, son técnicas de pincel y pedazos de pintura mezclados y transformados en ficciones, así como nuestras emociones,
Pedazos de tiempo, de destino, delirio, insensatez, pedazos de cosas que se anhelan, Pedazos que iban dibujando en la memoria momentos que nunca fueron ni serán reales, no serán de contar, no serán visibles, no como el arte que se hace y se esconde, más bien como el arte que hizo para ser destruido e incinerado.


Es verdad, lo cursi se me sale sin esfuerzo, con esfuerzo lo mantengo cuando me mezclo con vos
Aún más cierto es que de vos me enamoré hasta los huesos
Me trafugué los sueños, las morales de turno, le mentí a mi memoria y a mis consuelos

Di todo lo quise a quién hubiese querido amar sin pero alguno, pero hubo todos los peros que el destino quiso disponer para dejarme aquí sin tregua ninguna.

Lo hago y ya, te escribo esto sin mente, sin compasión tal vez, me dirás loca o quién sabe que infinidad más
Pero es que el aire va muy contaminado ya, va muy cargado e intoxicado de vos, y mis pulmones, mi corazón, mi alma, mi pobre almita ya se quieren curar
No hay otras maneras, no existentes o conocida por mi humanidad, las cosas se dicen si son verdad, los huesos me duelen de esperar, las rodillas me tiemblan por querer arrancar.

No sé si la cobardía me gana o a lo mejor esta vez yo le doy batalla, no se si llegues a leer tan siquiera la mitad de estas palabras, pero es aquí, es ahora

Con el cansancio de la noche y el maravilloso frescor que desde hace tantos días no sentía en esta amable ciudad
Es el perfecto momento para que las palabras se me agolpen conclusas y semi-ordenadas en la mente y, al menos, se animen a derramarse como agua entre los dedos
Aquí y ahora, aunque la lengua no se inmute y aunque sea casi imposible hablarte de frente o al menos escuchando tu voz al teléfono para contarte todo este cataclismo inepto
Es aquí y ahora cuando te digo que te amé como siempre quise amar a alguien o, tal vez, como nunca quise amar a alguien
Eso a decir verdad nunca lo sabré, no lo quiero saber
Las cosas que sé ya están dichas en este escrito, que no sé si llamar carta, declaración o mito, porque aquí se quedarán y jamás se te repetirán, no aunque estés al frente y los sepas, no aunque me pidas que acepte, nunca las mantedré más allá de este pedazo de verdad versada.
Es que es aquí y ahora cuando al fin puedo escribirlo, desincrustarme tu aroma del pecho y liberarme de unas cuantas palabras al tiempo, las mismas que me tragué y me rebozaron la realidad quien sabe hasta que punto ya.

Es aquí y ahora cuando te dejo perpetuo entre la A y la Z de los anteriores conceptos
Aquí quietecito en mi tiempo, congelado en mis recuerdos bellos
Ahora cuando ya no voy más, cuando lo que me anima es que tu tengas toda la paz, la calma y la vida llenita de lo que tanto anhelas alcanzar
Ahora cuando yo decido avanzar y seguir sin parar
Es ahora cuando te dejo atrás, ahí en el No Tiempo que al final nos acostumbramos a visitar.

Palabras en "orden" de una "loca" que le entregó la cabeza a algunos sentimientos de "amor".

Fecha: Para siempre, nunca.

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